Transito a ciegas el mundo de los vivos
Y me detengo ante sueños transeúntes.
Veloz la palabra de llagas hurgadora,
Cómo lenta la agonía del leproso.
Respiro el ántrax de las miradas
Y me lastima el aire de la cima.
Peligroso el pisotón de los gigantes,
cómo ágil el evadir de los enanos.
Retiro el fuego de la estufa
y descubro la luz sobre lo oscuro.
Tan gruesa la sombra de los techos,
Cómo clara la losa de los pisos.
Levanto el polvo de la sospecha
Y veo que lo cierto no está oculto.
Pues tan falsa es la verdad del embustero,
Cómo verdadera la falsedad de nuestro mundo.
Y me detengo ante sueños transeúntes.
Veloz la palabra de llagas hurgadora,
Cómo lenta la agonía del leproso.
Respiro el ántrax de las miradas
Y me lastima el aire de la cima.
Peligroso el pisotón de los gigantes,
cómo ágil el evadir de los enanos.
Retiro el fuego de la estufa
y descubro la luz sobre lo oscuro.
Tan gruesa la sombra de los techos,
Cómo clara la losa de los pisos.
Levanto el polvo de la sospecha
Y veo que lo cierto no está oculto.
Pues tan falsa es la verdad del embustero,
Cómo verdadera la falsedad de nuestro mundo.
09/04/06
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