A fuerza de gritar muy fuerte
Al fin
no sólo he sido escuchado,
sino que también han venido a rescatarme.
Pienso en aquellos que no han podido gritar;
En los que han gritado y no han sido escuchados;
En los que han sido escuchados y no han sido rescatados.
No se trata de la felicidad de estar de este lado,
Sino de no sentir el dolor de estar en la otra orilla
Y saber que no lo mereces,
Que no es justo, y la impotencia de no poder hacer más que gritar
A ver si alguien te escucha
Y te rescata.
13/06/07
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